El Ayuntamiento de Palencia, a través de los profesionales de los Centros Sociales Municipales, se ha involucrado de forma directa en la difusión del programa 'Alojamientos Compartidos' promovido por la Gerencia Regional de Servicios Sociales en colaboración con las principales universidades de Castilla y León como son las de Salamanca, Valladolid, Burgos y León.

Este programa, que arrancó en el año 1997 y se lleva a cabo en las nueve capitales de la Región, además de en Ponferrada, pretende poner en contacto a personas mayores de 60 años y estudiantes que cursan sus carreras fuera de su lugar de origen para que compartan piso y experiencias.

Para poder participar en esta iniciativa, las personas mayores deberán disponer de una vivienda en condiciones mínimas de habitabilidad, independientemente del régimen (propia, alquilada, cedida), contar con seguro de hogar, ser autónomos para el desempeño de las labores diarias, aunque tenga que ser con ayuda profesional o familiar y contar con una habitación que cumpla con las necesidades básicas para que el universitario pueda desarrollar su actividad académica, acceso a internet incluido.

Por parte de los estudiantes, se requiere que estos sean mayores de edad o menores con autorización de su tutor o tutores legales, estar matriculado en cualquiera de las cuatro universidades que participan en la iniciativa, hacerse cargo de la limpieza y mantenimiento de su habitación y colaborar en el del resto de la vivienda y abonar un 50% de los gastos comunes (electricidad, calefacción, agua o internet), sin superar nunca los 75 euros al mes.

Las universidades serán las encargadas de realizar un proceso de selección entre los interesados para poder emparejar perfiles coincidentes, garantizar la existencia de un seguro de hogar, realizar tareas de seguimiento y orientación, encargarse de los trámites administrativos necesarios y tener previstas alternativas para los estudiantes en el caso de que, por los motivos que sean, se produzca un cese de la convivencia.

Es un programa en el que todos ganan, puesto que da respuesta a las necesidades de apoyo y compañía de las personas mayores mientras que la persona universitaria se beneficia de un alojamiento para cursar estudios fuera de su domicilio familiar y de la compañía de la otra persona.