El Equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Palencia, encabezado por el Alcalde, Alfonso Polanco, se ha reunido esta tarde con los presidentes de las comunidades de vecinos de los bloques incluidos en el Área de Rehabilitación del Casco Urbano -ARCU- del Barrio del Carmen para explicarles que a día de hoy se está finalizando con la primera fase del Proyecto de Urbanización, que atañe a todo lo relacionado con las acometidas de alumbrado y telecomunicaciones, y que la segunda fase del mismo, que se centrará en la remodelación de las arcadas, terrazas y humedades de las zonas comunes, se encuentra en proceso de licitación.

Con esta segunda fase, que sumada a la primera, “en la que nos vimos obligados a realizar unas mejoras sobre la propuesta inicial para subsanar las deficiencias que no permitían la puesta en marcha de los ascensores”, señaló la edil de Urbanismo, María Álvarez, supone una inversión global superior al millón de euros, se podrá dar por finalizada la obra.

En lo que atañe a la puesta en marcha de los ascensores que restan, “ya que más de la mitad de los cuáles están en funcionamiento”, matizó Álvarez, cabe destacar el papel que juegan las propias comunidades de vecinos, las cuáles están informadas de que una vez que Iberdrola les notifique el cambio de tensión de 125 a 230 V, deben acudir a las oficinas de la suministradora eléctrica para dar de alta esta nueva línea y, posteriormente, a las de Orona -empresa responsable de los elevadores- para contratar el mantenimiento.“Ambos pasos son necesarios para que los ascensores puedan comenzar a usarse”, reiteró la responsable de Urbanismo.

María Álvarez quiso aprovechar la ocasión para dejar meridianamente claro que "la empresa no ha dejado de trabajar en ningún momento porque haya vecinos que no hayan pagado”, revelando además que el número de vecinos que se encuentran en esta situación en estos momentos ronda los 60 y que la práctica totalidad se corresponde con la primera fase del ARCU, “precisamente en la que no hay ascensores”, aseveró.

“Creo que el Ayuntamiento está haciendo todo lo que está en su mano, que se ha involucrado de forma absoluta en la resolución de todos los problemas con los que nos encontramos la obra cuando la heredamos, y todo ello pese a la renuncia de la asociación de vecinos, la cuál fue, y no conviene olvidar, la responsable tanto de contratar la obra como de su posterior gestión”, concluyó María Álvarez.