La lluvia ha dado un tregua este Domingo de Ramos. La alcaldesa, Miriam Andrés y el concejal de Urbanismo, Álvaro Bilbao, junto a otros miembros de la Corporación, han participado esta mañana en una de las procesiones más multitudinarias y queridas del ciclo penitencial palentino. Durante la celebración de la eucaristía, oficiada por el obispo Mikel Garciandía en la Catedral, los cofrades de las hermandades palentinas fueron llegando hasta la plaza de la Inmaculada. Cada una de ellas ocupó su posición para esperar la salida del único paso que desfila en esta procesión, 'La Entrada de Jesús en Jerusalén' y conocida popularmente como La Boriquilla obra de Víctor de los Ríos de 1956.
Todos los cofrades cumplieron con la tradición impuesta en esta jornada y a ninguno le faltó su palma. Entre los asistentes, gran número de niños que no quisieron faltar a esta procesión que se ha convertido en la preferida por los cofrades más jóvenes. Sobre las doce las puertas de la Catedral se abrieron anunciando la inminente salida del paso del interior de la seo ante un mar de palmas agitadas al aire. Posteriormente arrancó la procesión, que realizó un recorrido más corto de lo previsto, bien custodiada y ante la atenta mirada de cientos de vecinos y visitantes.
Horas antes tuvo lugar la Bendición de las Palmas de una procesión, organizada por la Cofradía del Santo Sepulcro, que este año había ampliado el llamamiento a niños en colegios de la capital consiguiendo nuevas incorporaciones para aumentar la participación. Más allá del carácter religioso, este evento adquiere ya un carácter sociocultural, turístico y económico para la ciudad de Palencia.
La meteorología acorta la procesión de 'La Borriquilla' en Palencia
13 de Abril, 2025