Identificar los hábitos de movilidad escolar de las familias palentinas. Ese ha sido el objetivo perseguido a lo largo del pasado año a través del “Laboratorio urbano para la movilidad escolar sostenible”. Un proyecto de investigación, llevado a cabo gracias a la colaboración del Ayuntamiento de Palencia y el departamento de Pedagogía de la Facultad de Educación de Palencia a través del Parque Científico de la Universidad de Valladolid y financiado por fondos EDUS perteneciente a la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible “Ciudad de Palencia 2014-2020”, encaminado a promover una cultura de la sostenibilidad, así como a poner en marcha acciones para mejorar la movilidad sostenible en los entornos escolares. Un proyecto, con el que se ha pretendido “indagar en los hábitos de movilidad de las familias de Palencia para emprender acciones formativas y reformas urbanas que facilitaran un tránsito escolar más respetuoso con el medio ambiente”.

En este sentido, la investigación llevada a cabo por un grupo de profesores e investigadores de la Facultad de Educación de Palencia, se ha realizó a través de una muestra de 24 centros escolares de educación infantil y primaria de la capital, 818 cuestionarios que han sido respondidos por las familias y un total de 628 niños y niñas de educación primaria en los procesos de acción-participativa.

Esta investigación se ha llevado a cabo desde el paradigma de la investigación-acción-participativa. Se ha optado por esta metodología porque permite analizar la realidad juntamente con los agentes implicados en el objeto de estudio. En este caso, se pretende estudiar la movilidad escolar a la vez que se inicia un cierto proceso de transformación social en los hábitos de desplazamiento.

Concretamente, el método de investigación-acción-participativa combina dos procesos: el de conocer y actuar, indagar y transformar. Se pretende, por tanto, describir y analizar los hábitos de desplazamiento habituales, así como los factores que los determinan, e intervenir en la transformación de los comportamientos ciudadanos en lo que a movilidad escolar sostenible se refiere. Se trata, de construir caminos escolares desde la participación familiar y escolar. Un proyecto, en el que se han seguido, básicamente, cuatro fases: observación del participante, investigación, acción participativa y evaluación.

ACCIONES DESARROLLADAS Y A PONER EN MARCHA EN LOS PRÓXIMOS MESES:

1.- Mapeo caminos escolares Palencia: hoy jueves se ha realizado la presentación de una aplicación donde se han reflejado los caminos escolares más transitados de Palencia. Se espera que la misma pueda ser de utilidad para familias y centros escolares. A lo largo de los próximos meses se difundirá en los centros escolares entre el alumnado, profesorado y familias.

2.- Señalización Caminos Escolares colegio piloto. Se ha indicado con señalética horizontal o vertical la ruta de ida y vuelta del CEIP Padre Claret y se han definido los puntos de encuentro seguros para niños y niñas. Las señales ayudan a identificar los lugares por donde transitan los escolares y ponen en actitud de alerta y cuidado tanto a los adultos como a los niños y niñas.

3.- Difusión en medios comunicación y redes sociales. De manera paralela se difundirán las acciones en medios de comunicación y redes sociales. Se pretende con ello sensibilizar sobre la necesidad de acudir a la escuela caminando y concienciar a la ciudadanía viendo a diario como van cambiando los comportamientos ciudadanos.

4.- Comercio local. Se quiere proporcionar a las niños, niñas y familias lugares seguros de encuentro a la vez que frecuentar el comercio de proximidad. De esta forma, se pretende implicar en los próximos meses a los comerciantes de la zona identificándose como “amigos de los caminos escolares”. Esto significa que pueden ser lugares de encuentro de niños, niñas y familia y que, de alguna manera, los niños y niñas pueden acudir a ellos en caso de necesidad.

5.- Policía local. La presencia de policía local en las calles se revela como un factor que las familias conciben como imprescindible. Se precisa que la policía acompañe este proceso facilitando el camino a la escuela de manera continuada y amigable. Los policías locales deben ser cómplices en materia de movilidad sostenible, esto requiere también de formación continuada en esta materia, además de determinación municipal. Se trata no solo de que vigilen sino también de que asesoren durante el camino escolar. De tal forma, que se conviertan en referentes en materia de movilidad sostenible, esto supone también que sus desplazamientos se realicen en vehículo únicamente cuando sea imprescindible y que pongan en valor los desplazamientos sostenibles de los niños y sus familias.

6.- Ampliación del tiempo para los peatones en los semáforos. Una de las observaciones más recurrentes realizadas por las familias está relacionada con los pasos peligrosos y los semáforos. En el mapeo se han indicados los pasos peligrosos sin señalizar que urge regular, así como los pasos de peatones que dejan escaso tiempo para el cruce de niños y niñas en horario escolar. En este sentido, urge ampliar el tiempo dedicado al paso de personas caminando, especialmente en los horarios de entrada y salida al colegio en los pasos cercanos a los colegios.

7.- Formación. Todas las acciones mencionadas anteriormente carecen de sentido si no se aplican de manera conjunta y continuada con un trasfondo pedagógico de fondo consistente en educar niños, niñas, familias y docentes. Los centros escolares recibirán durante los próximos meses cursos formativos sobre movilidad sostenible.

Unas acciones que según trasladan en el estudio deberán realizarse de “manera conjunta” en toda la ciudad en los próximos años, mediante un proceso gradual de implantación acompañando a cada centro escolar en este proceso de transformación. Es por ello, que se ha propuesto aplicar estas medidas en el CEIP Padre Claret de manera experimental para irlo ampliando al resto de colegios.

Asimismo, se propone a los centros escolares varios retos para el curso 23-24 como por ejemplo aumentar el número de niños que van al colegio caminando, participar en jornadas de sensibilización, introducir curricularmente la movilidad sostenible, desarrollar sesiones formativas o colaborar en el diseño de rutas, y en caso de conseguirlos obsequiarlos con alguna gratificación lúdica y pedagógica al finalizar el curso como puede ser excursiones a piscinas municipales, acceso gratuito a teatros o cines u otras actividades de carácter cultural, bonos gratuitos en el autobús local etc.